Te digo

¿Y qué más queda en este mundo si en el otro está lo mejor, lo deseado, lo insólito, lo hermoso, lo amado? No se apresuró a nada, ya sabía que sucedía, aún así le dijiste lo obvio, lo que ya sabía, lo que nunca pasaría. Creyó que así su mente se ocuparía pero da lo mismo, está aqui, miralo cómo sangra, después de exitar sus sentidos y mentes.

No le puedes dar un consejo de algo que ya sabe, no puedes decir que su mente se ocupará porque aún le quedará tiempo para continuar con lo que no gustas.


Déjalo en paz, él prefiere estar allá, es su problema, si vuelve, es su problema, si ya nunca lo miras por estos lares, es su problema...

Lluvia

Vamos, salgamos dónde la lluvia nos empapará, vamos que te quiero mostrar algo, tomémonos de la mano y disfrutemos de ésta lluvia de chocolate.

Bañémonos en ésta lluvia de chocolate, abrazados, mirándonos; bajo ésta lluvia de chocolate quiero que tomes mi cuello y le aprietes hasta marcar tus manos, márcalas ¡márcalas! Marca tus suaves manos en mi cuello, bajo ésta lluvia de chocolate.